Un juez federal de distrito sentenció a 92 años y seis meses de prisión a José Luis Abarca, exalcalde de Iguala, Guerrero, por el secuestro de seis activistas, entre ellos al dirigente social, Arturo Hernández Cardona.
También le impuso una multa de 920 mil 700 pesos por reparación del daño, sustituible por 15 mil jornadas de trabajo comunitario.
De acuerdo con la sentencia, el exalcalde es responsable del secuestro de Arturo Hernández Cardona, Ángel Román Ramírez, Rafael Balderas Román, Héctor Arroyo Delgado, Efraín Amates Luna y Nicolás Mendoza Villa, ocurrido en 2013 en el municipio de Iguala.
La sentencia firmada el pasado 12 de mayo por el juez primero de distrito de procesos penales federales, Samuel Ventura Ramos, absolvió a Abarca por el delito de delincuencia organizada, de acuerdo con Amapola Periodismo.
En septiembre de 2022, el mismo juez, Samuel Ventura Ramos, absolvió a Abarca por el delito de participar de forma intelectual en la desaparición forzada de los 43 estudiantes de Ayotzinapa, ocurrida el 26 de septiembre de 2014.
El 30 de mayo de 2013, Hernández Cardona fue desaparecido junto con otros activistas más -todos integrantes de la Unidad Popular-, un día después de que cuatro de ellos presentaron una denuncia en contra del entonces presidente municipal, José Luis Abarca Velázquez, de su esposa María de los Ángeles Pineda y de Felipe Flores Velázquez, exsecretario de Seguridad Pública local.
Declararon que tenían “temores fundados” de que los demandados podrían privarlos de vida.
Al día siguiente, los mismos simpatizantes bloquearon intermitentemente la carretera federal de la México–Acapulco. Hubo pleitos con la policía y los últimos en irse fueron ocho: Arturo Hernández Cardona, Héctor Arroyo Delgado, Efraín Amates Luna, Gregorio Dante Cervantes, Ángel Román Ramírez, Nicolás Mendoza Villa, Rafael Bandera Román y Jimmy Castejón.
Se alejaron en una camioneta particular y en el trayecto los desaparecieron.
El hallazgo de los cuerpos
El 1 de junio de 2013, a las seis de la mañana, encontraron los cuerpos maniatados y con signos de tortura sobre la carretera Iguala–Chilpancingo: eran Arturo Hernández Cardona, Félix Rafael Bandera Román y Ángel Román Ramírez.
Otros cuatro –Héctor Arroyo Delgado, Nicolás Mendoza Villa, Efraín Amates Luna y Gregorio Dante Cervantes– lograron escapar de sus captores.
Jimmy Castrejón, el último de los desaparecidos, pudo escapar el mismo día de la captura, pero se mantuvo oculto por miedo.
El activista Héctor Arroyo Delgado, una de las personas que logró escapar, se comunicó vía telefónica con el defensor de derechos humanos Bertoldo Martínez Cruz, le dijo que habían asesinado al ingeniero Hernández Cardona el día siguiente a la desaparición –el primero de junio– y que él se iba Iguala, pues temía por su vida.
(Animal Político)