Ciudad de México.- Frente a un zócalo abarrotado de personas vestidas de blanco y rosa, el exconsejero presidente del Instituto Nacional Electoral (INE), Lorenzo Córdova Vianello, alertó de las amenazas contra la Constitución y las instituciones garantes de la democracia, urdidas desde el poder ejecutivo y la mayoría elecciones del próximo 2 de junio.
Único orador de la llamada “Marcha por Nuestra Democracia”, en un discurso de casi 30 minutos, Córdova Vianello hizo un recuento de la lucha social por democratizar el país y que costó incluso vidas durante los últimos 40 años, y que la vida democrática va más allá del voto libre, sino que implica el derecho a acudir a los jueces cuando se es atacado, a tener acceso a la información de la obra pública, garantías para el libre ejercicio periodístico o la posibilidad de que la Suprema Corte anule una ley anticonstitucional, por ejemplo.
Frente a las vallas metálicas que protegen el Palacio Nacional, y que amanecieron forradas por mantas con las frases #VotoLibre y “Nuestra Democracia no se toca”, sin mencionar al presidente Andrés Manuel López Obrador ni a su partido Morena, el profesor universitario reprochó las intenciones de minar la democracia, misma que “no cayó de lo alto, ni es una concesión graciosa ni un regalo del poder”, apuntó.
“No se vale exigir reglas de equidad y condiciones justas en la competencia política siendo oposición, y violarlas sistemáticamente siendo gobierno, esa deslealtad hoy pone en peligro a nuestra democracia”, acusó Córdova Vianello luego de señalar que se pretende “destruir esa escalera” que le permitió acceder al poder “para que nadie más pueda transitarla”.
El exconsejero presidente del INE expuso que las pruebas de la amenaza de un “proyecto de regresión autoritaria” radica en las recientes iniciativas que buscarían “destruir las instituciones tal y como las conocemos”, presentadas el 5 de febrero por el presidente Andrés Manuel López Obrador. a quien no mencionó por su nombre.
“No se trata de especulaciones o de falsas alarmas, ahí están las iniciativas, se busca desaparecer los órganos autónomos para que las tareas vuelvan al ejecutivo tal y como sucedía hace 30 años, cuando estaban a cargo de una presidencia autoritaria”, resaltó Córdova Vianello.
Explicó que las pruebas de la regresión autoritaria están en la persecución política a través de procesos penales y juicios políticos, las reducciones presupuestales, las amenazas de presentar reformas para desmantelar a las instituciones o limitarlas en sus funciones o instituciones cooptadas a través de “personeros” del gobierno en turno.
Tras acusar los intentos de imponer “una visión del mundo y de nuestra nación”, el exconsejero admitió que las instituciones sí se tocan, cuando se trata de mejorarlas, pero “si lo que se quiere es destruirlas, destazarlas o cancelarlas, lo decimos fuerte y claro, las instituciones no se tocan”.
Defenestrado en múltiples ocasiones por López Obrador en sus conferencias matutinas, Córdova Vianello reprobó la pretensión de “dividir a la sociedad entre quien fuera el pueblo y sus enemigos”, cuando la división no sólo es “es falsa y artificial sino profundamente autoritaria, la sociedad mexicana no puede dividirse en blanco y negro”.
Al insistir que “no es el país de unos cuantos, mayorías y minorías cuentan con los mismos derechos”, el académico acuso que lo que se busca es “la concentración y la perpetuación del poder”, es decir, “la reinstauración autoritaria, regresarnos a partido hegemónico”.
El exconsejero del INE, llamó a los aspirantes presidenciales y demás puestos de representación popular, así como a su partidos y coaliciones a no olvidar “que deben someterse a la Constitución y la ley, les decimos sin titubes la ley sí es la ley”.
Recordó a los gobernantes su obligación de someterse a la Constitución y a los límites que les impone, en tanto que refrendó el deber de los ciudadanos para tener “elecciones libres y auténticas”.
Tras defender la independencia y autonomía del servicio profesional del INE en la organización de las elecciones, el constitucionalista llamó a los ciudadanos a participar como funcionarios de casilla, como observadores electorales y votar masivamente el 2 de junio
“La democracia es una obra la colectiva y su defensa es también lo es (…); estamos aquí para defender algo que es nuestro y que no vamos a permitir que nos lo arrebaten. Si los autoritarios no descansan, tampoco lo haremos quienes defendemos la libertad y la democracia”, manifestó Córdova Vianello.
Vivas a la Constitución, a la democracia, a las instituciones y a un México incluyente, fue la conclusión de un evento con campanadas de la Catedral Metropolitana de fondo.
Con el himno nacional, concluyó un evento cuyos cientos de miles de participantes -700 mil según los organizadores- empezaron a llenar la plaza principal del país al menos dos horas antes de que el orador único convocara a la defensa de la democracia.
La mayor parte de los asistentes partió del Monumento a la Revolución, donde se habían dado cita los distintos contingentes para marchar rumbo al zócalo capitalino, portando pancartas a favor de la democracia y el INE, mientras que algunos gritaban consignas contra el presidente López Obrador, calificándolo de “narco presidente” o “presidente delincuente”.
Si bien no estuvo presente en la manifestación la candidata de la coalición PAN-PRI-PRD, Xóchitl Gálvez, sí participaron algunos dirigentes de esos partidos, como Marko Cortés y Jesús Zambrano, así como Margarita Zavala y Mariana Gómez del Campo, así como el aspirante a la candidatura del Frente por Amor a México, Enrique de la Madrid Cordero.
(Proceso)