“No tengo candidata ni candidato” para la presidencia de Morena porque el presidente “ya no se mete en asuntos partidistas, no es jefe de partido, de grupo, no es jefe de facción, es jefe de Estado”, aseguró el titular del ejecutivo, Andrés Manuel López Obrador.
Sostuvo que ya “pasó a la historia” que el presidente de la república sea el jefe del partido en el gobierno. “Ahora somos respetuosos de la independencia, de la autonomía de los poderes y no nos metemos en asuntos partidistas”, aseguró.
“Espero que en todos los partidos haya democracia, que no haya imposiciones y que sea el pueblo el que decida libremente, pero sobre todo estoy comprometido con que se respete el voto de los ciudadanos, que se acabe con los fraudes electorales”, aseveró en conferencia de prensa.
Eso es un compromiso, añadió, “porque se afectó mucho al país con la antidemocracia, con las imposiciones, no sólo porque nosotros padecimos de fraudes electorales, fuimos víctima de fraude electoral, sino porque estoy absolutamente convencido que es perjudicial para el país”.
Afirmó que es una realidad por primera vez en décadas, como parte de la transformación del país, el presidente ya no se mete en asuntos partidistas. “Agradezco mucho a toda la gente que fundó Morena con mucho esfuerzo, con mucho sacrificio. Hicieron una labor heroica, fue una hazaña hacer a un lado al régimen corrupto, pero no debo meterme en los asuntos internos de Morena y no tengo desde luego ni candidata ni candidato preferido, como era antes”, subrayó.
López Obrador afirmó que cuando alguien llega a un cargo mediante un fraude “tiene que buscar legitimarse en el poder y para eso son capaces de cualquier cosa.
“Por eso vamos a estar muy pendientes de las elecciones próximas. Ya lo dije, se molestaron algunos, pero no está de más repetirlo: voy a convertirme en guardián de las libertades del pueblo y voy estar pendiente para que las elecciones sean libres y limpias”.
También, “que no se utilice el dinero del presupuesto para favorecer a ningún partido, candidato, que no se trafique con la pobreza de la gente, que se acaben todas esas prácticas vergonzosas como el acarreo, el llamado ratón loco, las urnas embarazadas, que voten los finados, la alteración de actas. Todo eso que sucedía, que es una vergüenza”.
Resaltó que antes el presidente, además de representar al poder de los poderes, al ejecutivo, y subordinar al poder judicial y al poder legislativo, porque así era, también era el que imponía candidatos. Era el jefe del partido”.
(La Jornada)