Plural en linea
María del Rosario Ibarra de la Garza, mejor conocida como Rosario Ibarra de Piedra, falleció este sábado 16 de abril en la ciudad de Monterrey, Nuevo León, informó la Comisión Nacional de los Derechos Humanos.
“Doña Rosario Ibarra, incansable activista, fundadora del Comité ¡Eureka! una de las primeras organizaciones de madres, padres, familiares de desaparecidos; pionera en la defensa por los derechos humanos, la paz y la democracia”, escribió la CNDH.
Su hija, Rosario Ibarra Piedra, es actualmente la presidenta de la comisión.
La senadora Ifigenia Martínez lamentó la muerte de Rosario Ibarra de Piedra a quien se refirió como “entrañable amiga e incansable activista y luchadora social”.
En un mensaje en Twitter, Martínez describió a Ibarra de Piedra como pionera en la defensa por los derechos humanos, la paz y democracia en México. Envió, también, un mensaje de condolencias a sus familiares e hijas.
El presidente Andrés Manuel López Obrador también envió un mensaje de condolencias para los familiares de doña Rosario.
“A nosotros nos apoyó en todo momento y nunca olvidaré que mi madre votó por ella para presidenta de la república”, escribió.
Rosario Ibarra de Piedra
Rosario Ibarra de Piedra nació en Saltillo, Coahuila, el 24 de febrero de 1927. Fue diputada, senadora y asesora política y también la primera mujer candidata a la presidencia de la república en 1982 y 1988 por el ahora ya extinto Partido Revolucionario de los Trabajadores, en la segunda ocasión uniéndose a los reclamos de fraude electoral contra Carlos Salinas de Gortari.
La lucha de Ibarra de Piedra comenzó en 1974, cuando su hijo Jesús Piedra Ibarra de 19 años fue víctima de desaparición forzada. El joven activista fue acusado de formar parte del grupo guerrillero “Liga 23 de Septiembre”, fue detenido de manera ilegal en Monterrey por agentes policiales que posteriormente lo entregaron a instancias castrenses.
La lucha de Rosario Ibarra de Piedra
“Fui niña feliz, madre feliz, casada feliz, hasta que me llegó el zarpazo de la represión cuando me quitaron un hijo y empecé a ser la madre de un desaparecido“, contó Rosario Ibarra de Piedra a la cineasta argentina Shula Erenberg para el documental “Rosario: Memoria indómita”, (2013).
Erenberg logró capturar la lucha de la activista a través de su propio relato. Una lucha que nunca concluyó, al contrario, fue la puerta para cientos de familias de desaparecidos en México.
“Tenemos la culpa todos los apáticos de este país que no han luchado contra ese crimen de lesa humanidad que es la desaparición forzada“, manifestó Ibarra de Piedra en una de las escenas del documental.
(Aristegui Noticias)