Al menos hasta 2023 la economía mexicana alcanzará los niveles que tenía en 2019, antes del impacto de la pandemia de Covid-19, estimó la calificadora internacional Moody’s.
En un reporte, anticipó que de las principales economías de América Latina, Chile, Colombia y Perú probablemente alcanzará los niveles de Producto Interno Bruto (PIB) de 2019 en 2022, mientras que Argentina, Brasil y México no alcanzarán sus niveles previos a la pandemia hasta al menos 2023.
Destacó que el ritmo de recuperación igualará o superará la tasa de contracción sólo para dos países, Guatemala y Paraguay.
La agencia evaluadora señaló que la recuperación general de la región latinoamericana hacia niveles de producción prepandémicos será lenta y desigual.
Esto, debido al fuerte impacto en el empleo, la falta de redes gubernamentales de seguridad social, los altos niveles de informalidad económica, los ahorros limitados y los niveles de ingresos relativamente más bajos en comparación con el resto del mundo.
Los países que dependen más de los servicios intensivos en contacto y los exportadores de petróleo enfrentan recuperaciones más débiles en comparación con las economías lideradas por las manufacturas.
Moody’s señaló que la perspectiva crediticia para los soberanos de América Latina y el Caribe en 2021 es negativa, lo cual refleja la expectativa de que las condiciones adversas que afectan la calidad crediticia de los soberanos continuarán en los próximos 12 a 18 meses.
En su informe, apuntó que, a pesar de la perspectiva de crecimiento que apunta a una reactivación económica en 2021, las crecientes presiones sociales dificultarán la capacidad de los gobiernos de restaurar el espacio fiscal perdido, lo cual ejercerá presión en la calidad crediticia en la región.
“En 2021, muchas economías de América Latina experimentarán una recuperación del crecimiento, beneficiándose de efectos base favorables tras la contracción sin precedentes generada por el coronavirus en 2020, la peor desde la gran depresión”, sostiene el analista de Moody’s, Jaime Reusche.
“Como resultado de la flexibilización de las medidas de confinamiento y del apoyo en materia de políticas públicas por parte de los bancos centrales y los gobiernos, la reactivación económica que comenzó en el segundo semestre de 2020 continuará. Muchas economías de la región crecerán más del 3 por ciento, pero el PIB permanecerá por debajo de los niveles previos a la pandemia tras una contracción de más del 5 por ciento en 2020”
(La Razón)