Desde la noche del lunes, aproximadamente a las 21:00 horas, hasta la madrugada del martes, la diputada Blanca Alcalá (PRI), vicepresidenta de la cámara de diputados, sufrió un secuestro exprés en la autopista México-Puebla, cerca de Chalco.
Según el informe de la Fiscalía estatal, un grupo armado detuvo a la diputada y a su chofer tras pinchar las llantas de la camioneta en la que viajaban.
Le robaron sus tarjetas de crédito para hacer retiros de efectivo y le quitaron sus pertenencias mientras la diputada permanecía retenida en un terreno baldío.
La legisladora también reveló que no fue la única víctima del grupo armado, ya que había otras personas detenidas a quienes también les robaron sus pertenencias.
Alrededor de las 4 de la mañana, fue liberada y pudo continuar su viaje hacia Puebla, donde presentó una denuncia ante la Fiscalía del Estado.
Esa misma noche, la dirigencia nacional del PRI expresó su apoyo a la legisladora en su cuenta de X y exigió a las autoridades una investigación exhaustiva del incidente.
Tras el hecho, el PRI pidió reforzar la seguridad en la carretera México-Puebla, del cual, asegura, “se ha convertido en un auténtico foco rojo”.
“Exigimos a las autoridades que refuercen la seguridad en esta vía, la cual se ha convertido en un auténtico foco rojo, poniendo en riesgo la vida de la ciudadanía”, reclamó el PRI.
(El Informador)