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Al anunciar el descubrimiento de un nuevo yacimiento en el municipio de Centro, Tabasco, el presidente Andrés Manuel López Obrador manifestó que la extracción del petróleo para lo que resta de su sexenio será de dos millones de barriles diarios y se destinará a la refinación. Además, dijo que no continuará la tendencia a exportar crudo y comprar gasolina, por lo que, sostuvo, toda la materia prima será procesada en México.
“Esta nueva política significa no extraer más petróleo que el indispensable para cubrir la demanda de combustibles del mercado interno. En términos cuantitativos, esto significa que durante todo nuestro mandato no sacaremos del subsuelo más de 2 millones de barriles diarios. Extraeremos aproximadamente la mitad del petróleo que se explotó en todo el sexenio de (Vicente) Fox”, señaló durante la conmemoración del 83 Aniversario de la Expropiación Petrolera.
“Con esta producción moderada cumpliremos el compromiso de reponer el 100 por ciento de las reservas probadas. De esta forma, evitaremos el uso excesivo de combustibles fósiles, seguiremos actuando de manera responsable y no se afectará la herencia de nuevas generaciones”.
Esta nueva cifra se aleja de lo que inicialmente había planteado el primer mandatario, quien en 2019 pretendía lograr una producción de 2.6 millones de barriles al día.
“Estamos hablando de aumentar poco a poco la producción y llevarla a dos millones 600 mil barriles para el 2024. Estaríamos produciendo lo que se tuvo durante el sexenio de Calderón. Nosotros tuvimos una mayor producción en los últimos tiempos en 2004, que se obtuvieron 3 millones 400 mil barriles diarios y nosotros estamos hablando de 2 millones 600 mil, estamos 800 mil barriles abajo. Entonces, no es apostar todo a la producción, no tendríamos además los recursos para eso, se tendría que endeudar al país, eso no lo vamos a hacer. Y una variable, como dirían los tecnócratas, distinta es que no hay la corrupción en Pemex que había en ese entonces y que había hasta el pasado gobierno”, dijo en la conferencia matutina del 24 de septiembre de 2019.
Luego, en la mañanera del 7 de septiembre de 2020, López Obrador bajó la meta a 2.4 o 2.2 millones de barriles diarios.
“Por eso no vamos a extraer crudo, como se hacía antes, de más de tres millones de barriles por día, ya no, dos millones 200, dos millones 400 barriles diarios para la autosuficiencia, para nuestras refinerías y no comprar la gasolina. Un manejo muy racional y muy acorde con la protección y la defensa del medio ambiente, porque son recursos no renovables. Entonces, no es extraer, extraer y extraer, y vender, vender y vender, para tener más dinero, pero a costa de una explotación irracional del petróleo, es una política distinta, nueva”, apuntó en ese entonces.
Este jueves, desde Centro, Tabasco, el jefe del ejecutivo destacó el rescate que su gobierno ha hecho por la industria de los hidrocarburos y reafirmó su compromiso de frenar la privatización del sector energético.
“El único dueño del petróleo es el pueblo de México y los beneficios del petróleo siempre serán para el pueblo de México”, expresó.
No obstante, afirmó que se respetarán los contratos otorgados de la llamada Reforma Energética, aunque recalcó que no se entregarán nuevas concesiones para la explotación del petróleo.
“Se protegerá a Pemex para mantener su participación actual en el mercado de las gasolinas, diésel y otros derivados del petróleo. Se cumplirá con la meta de producir en México las gasolinas que el país consume y dejaremos de importar combustibles del extranjero. Con este propósito se seguirán destinando recursos para la modernización de las seis refinerías existentes, se reiniciará la construcción de la planta coquizadora de Tula, Hidalgo y se terminará a mediados del año próximo la nueva refinería de Dos Bocas”, manifestó.
“Aún cuando se han descubierto tres importantes yacimientos como este que se llamará General Francisco J. Mujica en el municipio de Centro, Tabasco, la extracción del petróleo se destinará a la refinación y no continuará la tendencia a exportar crudo y comprar gasolina, es decir, toda la materia prima será procesada en nuestro país”.
AMLO refirió que en los años que restan de su sexenio se destinará más presupuesto para la exploración y perforación de gas; además, se invertirá en equipos e instalaciones para evitar la quema irracional del energético.
“Cabe recordar que a lo largo del periodo neoliberal se optó por desaprovechar este insumo extraído de los yacimientos nacionales y por comprarlo en el extranjero, todo ello para alimentar los negocios que estas compras representaban para políticos y directivos influyentes de empresas particulares nacionales y extranjeras”, comentó.
También adelantó que la Secretaría de Hacienda seguirá reduciendo impuestos a Pemex para garantizar la ejecución de su programa de inversión, mantenimiento y operación de instalaciones.
“Pemex es una empresa de la nación y siempre contará con el apoyo del gobierno. Mantendremos el compromiso de no aumentar en términos reales los precios de las gasolinas, diésel y otros combustibles, se acabaron los gasolinazos”, subrayó.
“Se terminará de limpiar de corrupción a Pemex, nunca más casos como los de Odebrecht o el de la compra a precios inflados de las plantas de fertilizantes, ni la entrega de moches o sobornos a funcionarios y a legisladores todo lo que representa significa una vergüenza. Reitero el compromiso con los trabajadores, técnicos y servidores públicos de Pemex, de no despedir a nadie y de respetar sus condiciones salariales y prestaciones laborales”.
“Asimismo, les expreso de nueva cuenta que mi gobierno garantiza el derecho de los trabajadores a elegir libremente a sus representantes sindicales. Con los obreros de esta industria y todo México, estamos rescantando a Pemex y a la nación”, finalizó.
(Aristegui Noticias)