PAN, PRI y PRD, partidos que conforman la coalición “Va por México”, anticiparon que en el Congreso de la Unión dirán no a la militarización de la seguridad pública y al control gubernamental de las elecciones, así como a las tarifas caras y al monopolio en la energía eléctrica.
Los dirigentes Marko Cortés, Alejandro Moreno Cárdenas y Jesús Zambrano Grijalva, respectivamente, rechazaron, en primer lugar, la intención de incorporar a la Guardia Nacional a la Secretaría de la Defensa Nacional.
“México contará con un bloque de protección constitucional contra las ocurrencias presidenciales e intentos dictatoriales. Vamos a apoyar todo aquello que dé soluciones reales a los graves problemas que atraviesa el país”, tuiteó el presidente nacional del PAN.
Aseguraron que la definición es que esta corporación esté en el ámbito civil, tanto en sus mandos como sus integrantes, con una estrecha coordinación con autoridades estatales y municipales.
Por otro lado, anticiparon que rechazarán cualquier intento de control gubernamental del presidente Andrés Manuel López Obrador que vulnere al Instituto Nacional Electoral (INE).
Por ello, establecieron como criterio general que los legisladores de la coalición habrán de aprobar todo aquello que fortalezca a la democracia, al INE y al Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF).
“Se rechazará cualquier intento de control gubernamental que vulnere al órgano electoral, los espacios y la voz de las minorías que representan la pluralidad del país”, sentenciaron los dirigentes, en un comunicado, luego de haberse reunido.
Respecto a los cambios anunciados a la Comisión Federal de Electricidad, se dijeron abiertos a que se discuta cualquier mejora que evite seguir teniendo apagones, que permita mayor competencia y mejores precios para los consumidores.
Además, afirmaron que buscarán una verdadera reforma energética, lo que necesariamente pasa por las energías limpias y renovables.
El martes pasado, el presidente Andrés Manuel López Obrador confirmó que sólo impulsará tres reformas constitucionales en el segundo trienio de su administración: electoral, eléctrica y para la Guardia Nacional.
Ante ello, los dirigentes del PAN, PRI y PRD pusieron énfasis en la necesidad de que el titular del ejecutivo presente las iniciativas concretas, para que sean valoradas en sus términos.
(El Financiero)